domingo, 27 de octubre de 2013

Amanece, que no es poco

Esta semana que acaba, el compañero-y-sin-embargo-amigo Xavier Fernández de Castro y un servidor de ustedes nos hemos ido de excursión por el centro de Kenia.

El viaje, como todos los que se hacen por estas latitudes, ha dejado momentos más que surrealistas. Desde las mujeres samburu usa-hombres, hasta los matatus que tardan dos horas en hacer 15 kilómetros, pasando por el señor que presume de haber creado "las mejores manzanas del mundo", las incursiones entre vacas y ovejas viajando en moto, las inverosímiles historias de los veteranos Mau Mau o las incontables veces que tuvimos que cruzar el Ecuador del norte al sur y del sur al norte para ir del hotel a trabajar.

Pero, al día siguiente, el sol siempre salía por el este, y no hizo falta ningún Guardia Civil que le disparara. Dejo algunas imágenes de los amaneceres de estos días, que solo por esto ya han valido la pena.

Amanece en Archer's Post, sobre el río Ewaso Nyiro


jueves, 17 de octubre de 2013

Kibera International Airport

A las siete y diecinueve del 7 de agosto, entró a mi móvil el siguiente mensaje: Fire reported at JKIA International Airport. Media reports indicate to avoid area. Expect possible delays in flights.

Me lo había reenviado Lucía, una amiga asturiana con quien, junto a su marido y su hijo, volaba hacia Madrid al día siguiente para disfrutar de unas no-sé-si-merecidas-pero-desde-luego-necesarias vacaciones. El mensaje posterior fue un emoticono con cara de mecagonsusmuertos, seguido de uno que nos alertaba de que se habían suspendido todos los vuelos.

Las imágenes que llegaban desde el Aeropuerto Internacional Jomo Kenyatta (JKIA) eran tal que así:


¿A alguien se le ocurre un modo mejor de empezar las vacaciones?

miércoles, 2 de octubre de 2013

Westgate, por dentro

Ayer martes, a eso de las diez de la mañana, los corresponsales de ABC, El Mundo y yo nos colamos en Westgate. No fue una infiltración tipo 007, como bormeaba el propio Xavi, sino más bien una carambola que salió gracias a un favor que nos hizo una empresaria española con una tienda en el centro comercial, combinada con la total falta de control y organización propias de esta zona.

Lunas de los escaparates hechas añicos, agujeros de bala por todas partes, casquillos entre los escombros, polvo negro consecuencia del humo sobre cada milímetro de la superficie, tiendas saqueadas... un espectáculo.

A continuación, unas cuantas imágenes de cómo ha quedado. Tratad de no ser severos en el juicio, que teníamos que jugar a no ser periodistas y hubo que hacerlas con el móvil.