martes, 26 de febrero de 2013

¿A quién vas a votar?

A menos de una semana para las elecciones en Kenia, nadie sabe muy bien qué va a pasar. Lo que todos los locales con los que he hablado desean es que los comicios transcurran de manera pacífica. Y, en cualquier caso, como hay dos rondas electoral salvo victoria por mayoría en la primera (lo cual sería una sorpresa, según todas las encuestas), si acaso las movidas vendrían más bien a mediados de abril, cuando se preve la votación de desempate entre los dos candidatos que cuenten con mayor apoyo en la primera ronda. Pero, como digo, nadie quiere que se repita una oleada de violencia postelectoral como la de finales de 2007 y principios de 2008, en la que murieron unas 1.300 personas y al menos 300.000 resultaron desplazadas.

A continuación dejo una serie de opiniones variadas sobre la intención de voto de gente de mi alrededor.

sábado, 23 de febrero de 2013

Solo7


Solomon Muyundu tiene siete letras en su nombre y siete en el apellido. Es el séptimo de sus hermanos, y nació el 7 del séptimo mes de 1977. No es de extrañar, pues, que se haga llamar Solo7. Es el autor de innumerables pintadas pacifistas en los muros de la barriada chabolista capitalina de Kibera, que registró mortales altercados durante la violencia postelectoral de finales de 2007 y principios de 2008. Kibera aportó una generosa porción de los alrededor de 1.500 muertos que perecieron en esos incidentes en todo el país y que dejaron también cientos de miles de damnificados. Ahora, aboga por unos comicios en paz el próximo 4 de marzo.

viernes, 15 de febrero de 2013

El caso

Volvía del cento de Nairobi un tanto puteado: la paciencia derrochada en el búnker amarillo que es la oficina de Inmigración keniana me había dejado los nervios un tanto al límite. Venía de volver a solicitar la tarjeta de residente después de que, días antes, me levantaran la cartera con todos los documentos. Era el 22 de agosto, el aniversario de la muerte de Jomo Kenyatta, el único día en el que se puede visitar su mausoleo, un recinto cerrado junto al Parlamento, en el que un pasillo de banderas nacionales desembocan en un horrible monumento de mármol negro. Pero era uno de esos días (debería dedicarles una entrada) en los que cuando los amigos de tus padres te preguntan por tu trabajo con un "¿y qué haces en Kenia?" responderías gustoso: "Eso mismo me pregunto yo". Uno de esos días.

Así pues, volvía a casa enfurruñado, también porque justo "este año sólo se permite la entrada al mausoleo a los familiares del señor Kenyatta". Y tres blancos tratando de acceder al recinto no colaba como parientes, acaso lejanos, del laureado padre de la patria.

Tomé el matatu en Uhuru Park de vuelta a casa y llamé a una amiga. En el despiste de la conversación (error de novato) me colaron una mano en el bolso y me levantaron la pasta. En la confusión del robo (error de novato II) me robaron también el móvil. Acabé con el ladrón en la calle, rodeado de mirones (digamos que el sentido del civismo entre el keniano medio... está por desarrollar). Pero el escándalo montado hizo que un policía se acercara desde una rotonda cercana y nos llevara a ambos a una comisaría.

Entonces no lo sabía, pero aquello era el inicio de un proceso judicial que iba a durar unos cuantos meses.

miércoles, 6 de febrero de 2013

Guía de las bestias de África oriental

Se dice que, excepto por El Padrino, las segundas partes nunca han sido buenas. A mí me vale con que sean dignas. Y A Guide to the Beasts of East Africa es digna secuela de la Guía de los pájaros de África oriental.

A finales del pasado año, me lo devoré como había hecho con el primero. El tono ya no resulta tan novedoso ni original, pero la descripción de ciertos aspectos y acontecimientos de Kenia, desde luego, sigue siendo más que acertada.
 
No sigas leyendo si tienes intención de darle una oportunidad. Pero es que, a partir de aquí, no puedo dejar de destacar algunos párrafos, sobre todo del mundo del safari (traducción libre).